Estan transcurriendo las horas definitorias en el campeonato de futbol con una apasionante definicion, cabeza a cabeza contra Estudiantes, y la atencion de muchos hinchas y socios solo esta puesta en ese objetivo.

Nos incluimos, pues siempre sostuvimos que es EL FUTBOL el motor fundamental de nuestro club y la verdadera pasion por la cual muchos deciden adoptar esta enfermedad tan seductora que resulta estar enamorado de lo Blanco y Marron.

Pero, que tengamos en claro la prioridad, no impide que no nos ocupemos de

otras circunstancias, casualmente, las que tanto enrostran quienes quieren imponer que las demas actividades recreativas, empezando por el basket ( aunque este gerenciado y superprofesionalizado) tambien merecen un sitial de privilegio dentro de las ocupaciones calamares.

Y en algo que no es la primera vez que tratamos desde este portal,en esta oportunidad, lo que produce un manifiesto desagrado y decepcion entre quienes llevamos el escudo CAP tatuado en la piel, es lo que sucedio en la VII Edicion de la Copa Cultura AFA Torneo de Ajedrez, donde nuestro Platense fue representado por tres perfectos desconocidos ( adjuntamos sus imagenes como ilustracion de esta nota y desafiamos a cualquier socio con trayectoria a que logre identificarlos y conocer sus nombres y permanencia en el club) teniendo ademas resultados pocos satisfactorios.

Esto, no es la primera vez que se repite, ya que en la edicion anterior, la dirigencia del club, tambien opto por "contratar" a otros tres desconocidos ( lo que aparecen con la campera blanca entre ellos una mujer) quienes tampoco tenian ninguna vinculacion previa con nuestra identidad,y por lo visto, tampoco la mantuvieron para este año..

Por que traemos esto a la palestra en estos momentos?

Primero, como para puntualizar que si bien a todos nos importa fundamentalmente el destino de la pelota de Futbol, no dejamos de ocuparnos de otras cosas simultaneas donde figura el nombre de Platense en competencia contra otras instituciones.

Pero segundo, tambien para demostrar, lo poco util y hasta perjudicial que resulta que el Departamento Fisico este "coordinado" por un Director Deportivo rentado como Marchioni ( insistimos, es un puesto que debe ser ejercido ad honorem por un vicepresidente) quien, sin respetar el sentido de pertenencia, contrata ( y suponemos que de forma rentada) a jugadores de ajedrez para prestarles nuestra camiseta y hacerlos pasar como representantes de Platense.

Por si alguno no lo tiene presente, les recordamos que el Departamento de Ajedrez hasta antes que asumieran las actuales autoridades, estaba a cargo de un socio ( perteneciente a este Movimiento) quien lo llevaba adelante en forma gratuita dando clases en el club y represento a Platense en este tipo de competencias por primera vez, obteniendo un fabuloso tercer puesto.

Despues, las razones politicas de aquellos que dicen que llaman a participar a todos los sectores, decidieron sacarlo del puesto aduciendo que querian darle a la actividad un "cambio de perfil" que por lo visto, se orienta en contratar a jugadores que ni socios son y obtienen peores resultados.

Poco nos asombra en este Platense "agrietado", donde los que estan temporalmente en el gobierno se encargan continuamente de profundizar diferencias con otros socios que no comparten sus ideas, y deciden nombrar a una persona ajena al club como Marchioni ( ex preparador fisico de Nardozza) como Coordinador Deportivo para que contrate foraneos en lugar de dejar participar a socios para defender los colores con los que se identifiquen o que desde el Departamento de Prensa y Difusion, un auto proclamado hincha de San Lorenzo sea el que se encarga de transmitir noticias absolutamente sesgadas y carentes de interes ( por ejemplo mandar una salutacion por el cumpleaños para el ex jugador Diego Diaz(??) mientras nada se informa de cuestiones institucionales de mucha mayor relevancia).

Que la pelotita decida entrar y permita conseguir el campeonato es el mayor anhelo de todos los hinchas de Platense.

Pero eso no impedira, por lo menos a nosotros, seguir remarcando las cosas que se vienen haciendo decididamente mal.