Segunda derrota consecutiva en el otrora imbatible Vte Lopez, esta vez ante el modesto Colegiales, con broche bochornoso a la salida donde aparecio el famoso gas pimienta para hacer que un sabado de derrota nublado y gris, con solo la asistencia muy magra de los socios, fuera aun mas lamentable.
Empecemos por lo (poco) que se vio en el campo de juego. Un Platense que
nunca encontro una linea de juego, que ya desde el comienzo sorprendio otra vez Bocca con la inclusion del resistido Nadal por el correcto Infante ( segun trascendio, la idea era armar dos duplas similares por los costados), al que le falto nuevamente generacion de juego y que nunca se mostro con hambre ofensivo.
Asi fue cayendo lentamente en la teleraña que le propuso Cole, que con un planteo sencillo se encargo de complicar a la otra vez dubitativa defensa calamar.
Sin embargo, sin merecerlo, fue Platense el que encontro la apertura del marcador, cuando, tras una serie de desaciertos ( comienza con un fuera de juego no sancionado a Palavecino que intento tirar un sombrero en lugar de encarar, lo que provoco unos rebotes que terminaron en un gol en contra) poco creibles lograron marcar el primero.
A los pocos minutos Miranda perdio un mano a mano increible, lo que hubiera significado que el partido quedase liquidado.
Asi termino la primera etapa, y se pensaba (aunque con este equipo nunca se puede estar tranquilo) que el complemento seria para disfrutarlo y no sufrirlo.
Y asi empezo la complementaria con un Platense agrandado, que tocaba y buscaba por abajo, intentando reconciliarse con el futbol. Hasta que llego la segunda jugada que marco el rumbo del match, cuando en una jugada intrascendente W Ortiz irresponsablemente se hizo expulsar y cambio el animo del equipo.( ya se habia hecho amonestar por una discusion sin sentido en un tiro libre a favor)
El equipo retrocedio, Bocca decidio el ingreso de Leguiza por Palavecino y volvio a sobrevolar el fantasma del equipo timorato.
Los de Munro se fueron animando, y aunque tambien perdieron a un jugador, no renunciaron a jugar y tras un grosero error de Mastrolia ( uno de los que bajo considerablemente su nivel) alcanzaron el empate. Lejos de conformarse, siguieron buscando mientras Platense se deshilachaba con esa irregularidad tan marcada que demuestra a lo largo de estas 18 fechas.
Asi no extraño que el tricolor se pusiera en ventaja y hasta pudo estirar la diferencia. El Calamar fue un canto a la impotencia y ni los cambios ni la actitud lograron cambiar nada.
Durisima derrota que no hace mas que evidenciar que como reza un tango de este equipo solo se puede esperar "Hoy un Juramento, mañana una Traicion".
No sabemos si es la deuda de dos meses de atraso en los sueldos, si es un bajon fisico, si hay problemas de vestuario, si es el DT el que no logra transmitirle a sus dirigidos, lo real es que asi no quedan chances de mantener la minima ilusion.
Y por si fuera poco, despues de haber sufrido otra actuacion decepcionante como local, cuando los socios quisieron huir despavoridos de la cancha , se encontraron con los portones cerrados que originaron mayor fastidio aun.
Esto provoco algun reclamo a la policia que en forma absolutamente desmesurada, comenzo con una represion que incluyo el uso de gas pimienta, y la consiguiente indignacion del escaso publico.
Conclusion? Un par de heridos, un patrullero dañado, la promesa de muchos sobre que nunca mas vuelven a la cancha y la casi segura sancion futura que recaera para el proximo partido como local.
Demasiados sinsabores para solo una mañana otoñal de sabado.
Los que perdieron contra el tricolor de Munro fueron:
El gol fue convertido en contra
Tambien ingresaron Leguiza (4) por Palavecino, Chavarri por Nadal y Lucero por Romero.
El proximo partido sera el sabado a las 13.00 hrs en Adrogue ante Bown